Proyecto Impars
Coordinadora: Núria Garí
Entrevista
Texto: Laura Andrès Tallardà e Irene Pérez Martínez
Fotos: Diana Segura
¿Cuándo empezaste a pintar?
Mis primeros recuerdos con la pintura son en verano, de muy pequeña, con mis hermanos y primos. También con ellos comencé a fotografiar. Mi madre nos dejaba utilizar su cámara de fotos y de vídeo, y pasábamos horas inventando historias y representándolas.
¿Y desde entonces sabías que querías dedicarte a ello?
La pintura es mi pasión desde pequeña y un sueño hecho realidad. Cuando me enteré que existía la carrera de Bellas Artes decidí al momento que iba a estudiar eso y solo quería que la etapa del colegio pasara rápido para empezar la universitaria.
Es tu vocación.
Totalmente. Aunque cuando la pintura se convierte en tu trabajo, todo cambia un poco porque tiene sus plazos de entrega y sus exigencias, pero no importa. Cuando pinto se me olvida el mundo. Me pongo delante del lienzo, pintando al aire libre, y a veces me doy cuenta de que se me ha ido la luz, que tengo frío y que ni he comido.
Un lienzo en blanco es una puerta a la imaginación, pero también puede suponer un reto. ¿Cómo encuentras la inspiración?
Siempre hago el proceso inverso: veo una imagen que me atrae y busco un lienzo para pintarla. Tengo muchas imágenes en el tintero que me gustaría pintar algún día porque estéticamente me fascinan o me impresionan por algún motivo.
Salvador Dalí decía que “Una pintura es una fotografía hecha a mano”. Tus universos son tanto la pintura como la fotografía. ¿En qué medida esos universos se retroalimentan entre ellos?
La fotografía y la pintura son canales para poder comunicarme. Las utilizo cuando me encuentro ante una escena en la que percibo una belleza que quiero transmitir. A veces, cuando no tengo pinturas o tiempo suficiente para pintar hago fotos, pero la sensibilidad que subyace en ambas es la misma.
India, Inglaterra, Italia, Portugal, Marruecos y Holanda dibujan tu porfolio fotográfico. ¿Cómo han ayudado esos viajes a construir tu mirada fotográfica?
Cuando me encuentro en un ambiente que es nuevo para mí, estoy con la mirada más atenta. En los viajes, el contraste cultural me facilita estar observadora y en constante asombro con la belleza. Esa mirada después se mantiene y se forja también en la cotidianidad.
La naturaleza está muy presente en tu obra.
Es fuente de inspiración y maestra. Cuando pinto, trato de descifrar y captar la arquitectura esencial de luces y sombras, de matices de colores, de contrastes y de atmósferas que se encuentran en la naturaleza.
Desde hace poco también pintas en bodas, captando la esencia del aperitivo que se celebra antes del banquete. ¿Cómo plasmas las impresiones de la celebración en pintura?
Busco captar aquello que me parece más significativo de la celebración, como si tuviera que hacer un resumen para explicarlo. Busco intuitivamente aquello que me resuena y me involucro mental y emocionalmente en la escena para representarla. Mientras pinto soy una observadora, pero no soy ajena.
Eres profesora de pintura en UIC Barcelona y en otros centros educativos. ¿Qué aprendes tú de tus alumnos?
Aprendo mucho. Cada uno tiene una sensibilidad y un modo de mirar único. Es muy bonito ver que de un mismo modelo salen interpretaciones muy distintas, con un estilo y una paleta de colores particular. Aprendo de ellos otras formas de comprender el mundo, de sorprenderse y de observar detalles. También aspectos más prácticos como la manera en que deciden cuándo dar por terminada una obra o cómo resuelven obstáculos que surgen al pintar.
UIC Barcelona tiene una colección de Natividades que cada año incorpora una nueva obra. Este año eres tú la artista seleccionada para crear la pintura de Navidad. ¿En qué has basado tu propuesta?
En las Escrituras del Evangelio, en otras representaciones de la natividad en la historia del arte y en las imágenes de pesebres que he visto toda la vida.
He incluido ovejas y estas tienen un significado especial para mí: en el pesebre de casa, cuando éramos pequeños, cada miembro de la familia estaba representado por una oveja y dábamos pequeños pasos diarios, desde el lejano desierto hacia el portal, si nos habíamos portado bien. El objetivo era estar el 25 de diciembre adorando al niño Jesús.
¿Qué técnicas utilizas a la hora de crear tus obras?
Para las ilustraciones utilizo técnicas como la acuarela, el guache, el carboncillo, el grafito o la tinta china; para los cuadros, pintura al óleo sobre lienzo, madera o papel. Últimamente también estoy explorando técnicas digitales, para combinarlas con las tradicionales
¿Qué proyectos artísticos tienes entre manos de cara al futuro?
Tengo muchos. Uno de los que más me ilusiona es realizar una serie de retratos de artistas trabajando en sus talleres y exponer de manera colectiva con ellos. Por ahora he pintado dos y me encanta la experiencia de conocer el proceso creativo de artistas que admiro.
Si tuvieras que definirte a ti misma como artista con solamente cinco palabras ¿cuáles serían?
Me cuesta mucho definirme a mí misma como artista porque mi estilo va desarrollándose con el paso del tiempo. Cuando tanteo algunos adjetivos, pienso que me limito de cara al futuro. Sin embargo, “curiosa”, “multidisciplinaria” y “contemplativa” son algunos términos con los que me identificaría hasta ahora como artista.
